ADULTERIO (Adultério) - Paulo
Coelho
5/10
Tengo que empezar por decir que no soy fan de este escritor
en absoluto; me parece un autor que a lo largo de los años y a lo ancho de su
éxito ha ido abandonando su autenticidad por la comercialidad. Hoy en día sus
libros encajan perfectamente en la sección de autoayuda: nada que objetar,
salvo que un talento como el suyo no debería venderse al mejor postor... no sé
si me explico. ¿Dónde quedó el ingenio del autor de El Alquimista? ¿Qué pasó con la clarividencia del narrador de la
magnífica Verónica decide morir?
Así las cosas, lo cierto es que no hace mucho cayó en mis manos
la última novela del brasileño: Adulterio.
En principio, lo que contaba la solapa del libro no me pareció mal: una mujer
que lo tiene todo pero que se siente infeliz y vacía.... ¿Alguien se siente
identificado? ¡Por supuesto que sí! El libro nos habla de romper con las normas
sociales (sociedad del mundo rico occidental, se entiende) para centrarnos en
nuestro interior: ¿Qué quiero?, ¿Qué persigo?, ¿Qué me hace sentir bien?, ¿Por
qué no soy feliz si aparentemente lo tengo todo?, ¿Qué me falta?, ¿Qué huecos
tengo en mi interior?, ¿Cómo puedo llenarlos?... Un sinfín de preguntas que
algunos nos planteamos, pero a las que, en mi opinión, Coelho no sabe dar una
respuesta verosímil, aplicable, profunda o convincente.
El libro arranca muy bien. Una historia creíble, bien narrada
y argumentada, tal vez demasiado estereotipada, pero puede servir... y, de
repente, se rompe: Coelho embute sin ton ni son un capítulo acerca de la fe en
Dios que nos hace perder totalmente el hilo y el interés. ¿Qué pasa? Que asistimos
sin quererlo a un desfile de frases ñoñas y remilgadas, obvias, cursis y
manidas:
“Vivir es tomar
decisiones y asumir las consecuencias.” (¡No me digas!)
“No todo el mundo
necesita ser feliz todo el tiempo. De hecho, nadie en este mundo puede. Hay que
aprender a lidiar con la realidad de la vida.” (¡Caray!, no se me había ocurrido.)
“No mostramos nuestros
sentimientos porque la gente puede pensar que somos vulnerables y aprovecharse
de ello.” (¡Vaya!,
qué concepto tan novedoso.)
“Soy libre para amar a
cualquiera en el mundo”. (¡Menos mal!)
“Amar es transformar la
esclavitud en libertad.” (¡Caramba!)
Sin embargo, unos pocos capítulos después, Coelho sabe
recuperar la trama y hacerla avanzar, los lectores nos sentimos bien, medio
atrapados otra vez, pero... ¡ay!... con la mosca ya detrás de oreja. Y no somos
mentecatos, sabemos lo que nos espera, un final decepcionante, vacuo, insulso y
muy alejado de las expectativas que en un principio nos podríamos haber creado.
Y cerramos el libro y nos olvidamos de él.
Acerca del autor:
Paulo Coelho de Souza (
24 de agosto de
1947,
Río de Janeiro) es un
novelista,
dramaturgo y
letrista brasileño. Es uno de los escritores más leídos del mundo con más de 150 millones
de libros vendidos en más de 150 países (224 territorios), traducidos a
80 lenguas. Desde octubre de 2002 es miembro de la Academia Brasileña
de las Letras. Ha recibido destacados premios y reconocimientos
internacionales, como la prestigiosa distinción
Chevalier de L'Ordre National de La Legion d'Honneur del gobierno
francés, la Medalla de Oro de
Galicia y el premio
Crystal Award que concede el
Foro Económico Mundial,
entre muchos otros premios que ha obtenido gracias a su gran éxito.
Además de recibir destacados premios y menciones internacionales, en la
actualidad es consejero especial de la
Unesco para el programa de convergencia espiritual y diálogos interculturales así como Mensajero de la Paz de
Naciones Unidas.
Escribe columnas periodísticas semanales que se publican en medios de todo el mundo. Alcanzó el éxito con su mayor obra
El alquimista. Paulo está casado con la pintora brasileña
Christina Oiticica.